Es la mayor de las culebras chilenas. Es un predador diurno nada fácil de observar, inofensivo para el ser humano. Es un reptil ovíparo que pone entre 6 a 8 huevos.
Es un hongo comestible mientras se conserva inmaduro y sus lamelas (láminas ubicadas al interior del píleo) están libres (no están unidas al sombrero), son delgadas y de color blanco en ejemplares jóvenes. Estas últimas, con el tiempo se tornan color rosado y finalmente de un color negro, pareciendo a primera vista que le escurre una tinta negra.
Su esporada es de color negro y es aquella que aparenta ser una tinta.